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| COLMADA. Así estuvo la cabecera norte del Malvinas Argentinas, a pleno de hinchas de River. |
Esta tarde, la AFA daría marcha atrás con la restricción del público visitante en la B Nacional. La iniciativa fue impulsada por los clubes, luego de la gran convocatoria que generó River en Mendoza. "A nivel económico, las instituciones tampoco estamos para regalar nada", explicó el presidente de Defensa y Justicia, Lemme.
La jugada de Daniel Vila no le salió gratis a la Asociación del Fútbol Argentino. Después de que el presidente de Independiente Rivadavia habilitara unas 12.000 entradas para los hinchas de River en el encuentro del último sábado en Mendoza, el resto de los clubes de la categoría manifestaron interna y públicamente que no están dispuestos a perderse la revolución que genera el club de Núñez en la B Nacional.
Es que sólo desde lo económico, el desembarco de River en condición de visitante resulta tan atractivo para los equipos del Interior como para los de Capital y Gran Buenos Aires. No es para menos si se tiene en cuenta que el club mendocino embolsó casi un millón de pesos únicamente con la parcialidad millonaria. Entre las doce mil localidades de la Cabecera Norte, que se vendieron a 45 pesos cada una, y las ocho mil ubicaciones que ocupó la gente de River en la platea cubierta y descubierta, las cuales costaron entre 60 y 80 pesos, Independiente tuvo ingreso descomunal para un partido de la categoría.
"La restricción empezó en 2007 y nosotros hemos colaborado, pero ahora entendemos que tenemos que rever esta medida. Hay una realidad y no se puede negar lo que es River a nivel nacional", explicó José Lemme, presidente de Defensa y Justicia, quien además señaló: "La situación más complicada la tenemos en Buenos Aires, por el cruce de hinchadas, pero habrá que buscarle la vuelta. Yo creo que habrá un aval positivo en la reunión porque para muchos es importante que venga River. La parte económica por abrirle la puerta a la gente es importante y las instituciones no estamos para regalar absolutamente nada".
Sumado a ello, el sábado en el Malvinas Argentinas quedó demostrado que al hincha de River, al hincha genuino, lo único que le interesa es acompañar al equipo en cada partido, de manera pacífica y bajo las condiciones que sean. Alrededor de 20 mil riverplatenses fueron sin banderas ni camisetas al primer partido de La Banda en condición de visitante y desataron una verdadera fiesta, como debe ser, con el clásico folclore del fútbol argentino y dos hinchadas conviviendo adentro de una misma cancha.
La jugada de Daniel Vila no le salió gratis a la Asociación del Fútbol Argentino. Después de que el presidente de Independiente Rivadavia habilitara unas 12.000 entradas para los hinchas de River en el encuentro del último sábado en Mendoza, el resto de los clubes de la categoría manifestaron interna y públicamente que no están dispuestos a perderse la revolución que genera el club de Núñez en la B Nacional.
Es que sólo desde lo económico, el desembarco de River en condición de visitante resulta tan atractivo para los equipos del Interior como para los de Capital y Gran Buenos Aires. No es para menos si se tiene en cuenta que el club mendocino embolsó casi un millón de pesos únicamente con la parcialidad millonaria. Entre las doce mil localidades de la Cabecera Norte, que se vendieron a 45 pesos cada una, y las ocho mil ubicaciones que ocupó la gente de River en la platea cubierta y descubierta, las cuales costaron entre 60 y 80 pesos, Independiente tuvo ingreso descomunal para un partido de la categoría.
"La restricción empezó en 2007 y nosotros hemos colaborado, pero ahora entendemos que tenemos que rever esta medida. Hay una realidad y no se puede negar lo que es River a nivel nacional", explicó José Lemme, presidente de Defensa y Justicia, quien además señaló: "La situación más complicada la tenemos en Buenos Aires, por el cruce de hinchadas, pero habrá que buscarle la vuelta. Yo creo que habrá un aval positivo en la reunión porque para muchos es importante que venga River. La parte económica por abrirle la puerta a la gente es importante y las instituciones no estamos para regalar absolutamente nada".
Sumado a ello, el sábado en el Malvinas Argentinas quedó demostrado que al hincha de River, al hincha genuino, lo único que le interesa es acompañar al equipo en cada partido, de manera pacífica y bajo las condiciones que sean. Alrededor de 20 mil riverplatenses fueron sin banderas ni camisetas al primer partido de La Banda en condición de visitante y desataron una verdadera fiesta, como debe ser, con el clásico folclore del fútbol argentino y dos hinchadas conviviendo adentro de una misma cancha.
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